Podría haber sido un peliculón, pero por desgracia se ha quedado sólo en película. Reconozco que fui al cine a verla esperando enamorarme de ella, y si hubiese tenido en cuenta tan sólo la parte musical, así habría sido, por desgracia las películas también tiene historia, y esta, por mucho que me pese, no la cuenta nada bien. Las escenas se atropellan mutuamente, resumen partes del libro hasta dejarlas sin sentido y apocopan la historia hasta hacer una breve sinopsis de cada capítulo (en los cuales es difícil seguir el hilo). Con lo cual, al final, es inevitable sentir en todo momento que te falta algo.
La verdad es que me da muchísima rabia que pudiendo haber hecho una película extraordinaria se quedaran a medias. Comprendo que es un musical, y comprendo también que las películas tienen un límite de tiempo, pero no hubiese estado demás un guión intermedio sin cantar, que una copia de un musical que al fin y al cabo ya teníamos.
¿Lo más destacable?
La increíble voz que le descubrimos a Russell Crowe y la maravillosa interpretación de Anne Hathaway como Fantine. Si no se te ponen los pelos como escarpias en el momento en el que canta "I dreamed a dream" es que no tienes corazón.
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